El uso del plástico en la agricultura es una práctica común en todo el entorno. Los agricultores utilizan plásticos agrícolas para cubrir el suelo, regular la temperatura, conservar la humedad y prevenir el crecimiento de malas hierbas. Sin embargo, la gestión inadecuada de estos plásticos puede tener efectos negativos en el medio ambiente, la biodiversidad y la salud humana. Es por eso que es importante buscar soluciones sostenibles y circulares para el uso de plástico en la agricultura.
El impacto ambiental del plástico agrícola
Actualmente, solo una pequeña parte de los plásticos agrícolas se recoge y recicla, mientras que la mayoría se entierra o se deposita en vertederos. Esto tiene consecuencias negativas en los ecosistemas y la biodiversidad. Por ejemplo, las películas plásticas utilizadas para cubrir el suelo pueden dejar residuos de plástico que causan erosión y reducen la infiltración de agua. Además, los plásticos abandonados se degradan en microplásticos, que pueden acumularse en el suelo y perjudicar a los organismos beneficiosos y pasar a las cadenas alimentarias.
Ante esta problemática, es necesario controlar mejor la cantidad de plásticos utilizados en la agricultura y promover modelos más responsables, como la bioeconomía sostenible y circular.
La bioeconomía como solución sostenible
La bioeconomía sostenible y circular se basa en el uso responsable y eficiente de recursos biológicos renovables, como plantas, algas, hongos y bacterias. Esta ofrece soluciones prometedoras para mejorar la sostenibilidad de los plásticos utilizados en la agricultura.
En primer lugar, es posible eliminar el uso de plásticos en algunos casos, utilizando cultivos de cobertura y residuos vegetales en lugar de películas plásticas. Esto reduce la dependencia de los plásticos y promueve la reutilización de recursos naturales.
En segundo lugar, se pueden utilizar plásticos biológicos, fabricados total o parcialmente a partir de recursos biológicos. Estos plásticos son menos tóxicos y tienen una menor huella ambiental y de carbono en comparación con los plásticos derivados del petróleo. Sin embargo, todavía existen desafíos en cuanto al costo, la separación de residuos, la biodegradabilidad y la compostabilidad de estos materiales.
Por lo tanto, las opciones biodegradables y compostables son recomendables en aquellos casos en los que los plásticos no se pueden evitar, sustituir por materiales reutilizables o retirar fácilmente. Estos plásticos pueden descomponerse por microorganismos naturales, como bacterias y hongos, reduciendo así su impacto en el medio ambiente.
La biorremediación como solución innovadora
Además de utilizar plásticos más sostenibles, la bioeconomía también ofrece soluciones innovadoras para reducir la contaminación por microplásticos y otros contaminantes en la agricultura. La biorremediación, que utiliza organismos vivos como plantas y bacterias, puede ayudar a mitigar la contaminación en el suelo y el agua.
Estudios han demostrado que ciertos microorganismos y plantas pueden eliminar micro y nanoplásticos del suelo y el agua. Esta técnica puede ser una forma efectiva y natural de limpiar los sistemas agrícolas y reducir la acumulación de plásticos en el medio ambiente.
El papel de la FAO en la gestión sostenible de los plásticos agrícolas
Dado que gran parte de los residuos plásticos provienen de los sistemas agroalimentarios, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) está trabajando en soluciones y apoyando a los gobiernos en la gestión sostenible de los plásticos agrícolas.
La FAO está implementando proyectos como el financiamiento de la reducción y gestión de los productos agroquímicos (GEF FARM), que tiene como objetivo fortalecer las políticas y marcos normativos para reducir y mejorar la gestión de los productos agroquímicos y de plástico utilizados en la agricultura en países como Kenya y Uruguay.
En el sector pesquero, la FAO está codirigiendo el programa de Asociaciones GloLitter, que ayuda a los países en desarrollo a prevenir y reducir la basura marina. Este programa apoya la creación de capacidad, las reformas normativas e institucionales, las medidas de ordenación de los desechos portuarios y la prevención del abandono de artes de pesca.
El plástico agrícola es una herramienta importante en la agricultura, pero su gestión inadecuada puede tener consecuencias negativas en el medio ambiente y la salud humana. Es por eso que es necesario buscar soluciones sostenibles y circulares para su uso.
La bioeconomía sostenible y circular ofrece alternativas prometedoras, como el uso de plásticos biológicos y la biorremediación, que pueden reducir el impacto ambiental de los plásticos agrícolas. Además, la FAO está trabajando en proyectos y programas para promover la gestión sostenible de los plásticos agrícolas y reducir la contaminación en el sector agroalimentario.
Es fundamental adoptar prácticas agrícolas más sostenibles y responsables en relación con el uso del plástico. Esto no solo beneficiará al medio ambiente y la salud humana, sino que también contribuirá a la seguridad alimentaria y a la sostenibilidad de los sistemas agrícolas.
Si te ha interesado Plástico agrícola sostenible: solución circular en agricultura, te invitamos a explorar más sobre plásticos, policarbonatos y acrílicos en nuestra categoría Plásticos.